La otra visión

Hace un tiempo Bolboreta me comentaba preocupada que en Barcelona no habia logrado encontrar "amigos chico", que era dificil y que además solo veian en una "amiga chica" las posibilidades carnales de poder algún dia acabar en la cama con alguna.
En el fondo, no puedo darle la razón porque yo nunca he vivido en Galicia y no sé como se comportan y si en realidad son diferentes a los chicos de aqui o no. Por otro lado yo aqui si que, a lo largo de los años , he podido entablar buenas amistades con chicos. Y para muestra de ello, un botón. Ese botón se llama...PEPE. Me encanta esto de los pseudos jeje
A Pepe lo conozco desde que empezamos juntos en el instituto, de eso hace ya la friolera de 10 años. Nos sentábamos en la última fila de la clase y juntamos nuestras mesas para asi poder hablar más y entretenernos en clases donde el aburrimiento era tal que Pepe se podia permitir el lujo de hacerme trenzas en el pelo o peinarme. A Pepe le encanta el pelo largo, cuanto más largo, mejor. Dice que le gusta mi pelo, le encanta enredar sus dedos en él y me regaña cada vez que paso por el peluquero a "cortarme las puntas".
Lo bueno de conservar una amistad como Pepe, es que puedo tener la otra visión. Todas mis últimas historias, pasan por el tamiz Pepe. A mi me encanta la sinceridad que tiene además. Asi no solo tengo el sabio punto de vista de mis amigas. Pepe y yo nos lo contamos todo. A mis últimas aventuras con Chema, le añadió su toque personal. Después de contarle los pormenores también sexuales, y sus caras de sorpresa....claudicó mi relación con él de la siguiente manera:

" A ver Chouette, sé que suena duro y directo, pero mi opinión es la siguiente: Chema te ha utilizado.....utilizado como masturbación asistida. Y tu has sido su asistente"

Podria parecer que después de esta frase lapidaria, me echaria a sus brazos desconsolada y llorando a moco vivo..pero no, sólo acerté a reirme...de sus palabras y de mi misma.

Gracias Pepe por tu síntesis y tu visión. Gracias por ser mi amigo y por hacerme pasar ratos impagables.

Aparte de eso, tener un amigo chico está lleno de ventajas. Como no hay atracción sexual, no tenemos que estar divinos de la muerte las 24 horas ni preocupados por como nos veremos cuando por ejemplo estemos de viaje juntos. En los hoteles, pueden darnos cama de matrimonio tranquilamente sin que ello suponga un trastorno. Y también, lo puedo usar de cómodo almohadón cuando me quedo frita en su flamante sofá y se me cae la babilla. No le importa, es mi amigo, y me quiere.